Entrada ¨Lagrimas¨

🔹️"El arte,el artista y otras cuestiones"

🔹️Marcelo Rubéns Balboa《Artista plástico,Montevideo,Uruguay🇺🇾》 En la actualidad,estamos inmersos en un mundo alocadamente globalizado,don...

martes, 25 de noviembre de 2025

🅰️lzando la memoria •°


Con los brazos pequeños,
pero el pulso firme,
el niño levanta el cuadro
como quien sostiene un faro
en medio del viento.

En su mirada no hay juego,
hay herencia.
Una semilla encendida
por historias que no vivió
pero que lo llaman por su nombre.

El rostro de Fidel,
quieto en el marco,
parece mirar a través del tiempo,
hacia esas manos jóvenes 
que lo elevan sin temblar.

Y entre callejones silenciosos,
la escena se vuelve símbolo: 
un niño que alza la memoria
para que no caiga,
para que no la borren,
para que siga andando
como un tambor que nunca calla 
en el corazón de los pueblos.

Así,la infancia y la historia
se encuentran un instante,
y el futuro se levanta
sobre dos pequeñas manos
que ya saben que la dignidad 
también se sostiene.

Ⓜ️arcelo Rubéns Balboa ✍️ 

sábado, 22 de noviembre de 2025

🇻🇳🔸Ho Chi Minh,la memoria incómoda y la cobardía política en Uruguay🔸🇻🇳


Resulta profundamente revelador que,en pleno siglo XXI,en Montevideo —una ciudad que se precia de plural,progresista y abierta al diálogo con las luchas emancipadoras del mundo— se haya producido un rechazo hacia la instalación de una estatua de Ho Chi Minh,uno de los líderes más trascendentales de la liberación antiimperialista en el siglo XX.
El hecho no es menor: sintetiza una discusión más amplia sobre qué voces,qué símbolos y qué memorias son legítimas en el espacio público,y cuáles deben ser silenciadas para no incomodar al orden dominante.

Ho Chi Minh dedicó su vida entera a la liberación nacional,a la unidad de su pueblo y al proyecto de construir una sociedad libre de toda dominación colonial y capitalista. 
Fue un dirigente que vivió frugalmente,que rechazó los privilegios personales y cuyo legado continúa siendo,en Vietnam y en gran parte del mundo,un ejemplo de coherencia revolucionaria.
Esa coherencia es,justamente,lo que aterra a ciertos sectores uruguayos.

🔸1) La estatua que incomoda: el problema no es Ho Chi Minh,sino lo que representa:

Quienes hoy se escandalizan ante la idea de homenajear a Ho Chi Minh no lo hacen por desconocimiento. 
Saben perfectamente lo que su figura simboliza:
la resistencia de un pueblo pequeño contra un imperio gigantesco; la voluntad inquebrantable frente a la ocupación extranjera;la defensa del socialismo como proyecto histórico;el ejemplo de un líder que jamás se arrodilló ante los poderosos.

Ese conjunto de valores confronta directamente con la cultura política dominante en Uruguay,una cultura que,bajo discursos progresistas o republicanos,mantiene una profunda sumisión simbólica e ideológica al orden norteamericano y europeo occidental.
Por eso un monumento a Ho Chi Minh descoloca: porque recuerda que la dignidad existe,que la historia ofrece ejemplos de resistencia real y que otros pueblos sí fueron capaces de romper las cadenas que aquí muchos consideran naturales.

🔸2) La hipocresía de quienes hablan de “derechos humanos selectivos”:

Los detractores de la estatua recurren al repertorio clásico:“régimen”, “autoritarismo”,“violaciones a los derechos humanos”.
La acusación resulta paradójica viniendo de sectores que jamás levantaron la voz contra las masacres en Vietnam cometidas por Estados Unidos,contra los bombardeos de alfombra, contra la tortura,contra los millones de muertos civiles,contra el agente naranja que hasta hoy envenena tierras y cuerpos.

Ese silencio no fue casual. Fue ideológico.

La defensa de los derechos humanos,en estos casos,no es más que una excusa para proteger el privilegio occidental y para deslegitimar cualquier victoria antiimperialista. 
Condenan a Vietnam por haber resistido,por haber vencido,por no haberse rendido nunca.
Pero cuando el agresor es una potencia occidental, entonces miran hacia otro lado. 
Es el doble rasero de siempre.

🔸3) Montevideo,una ciudad que vacía su identidad internacionalista:

Durante décadas,la izquierda uruguaya cultivó un discurso de solidaridad con los pueblos del mundo: con la lucha antifascista,con la resistencia española,con la independencia africana,con Cuba,con Palestina y con Vietnam.
Esa tradición internacionalista fue parte del ADN de la sociedad civil uruguaya y de muchos de sus movimientos populares.

Sin embargo,negar una estatua a Ho Chi Minh no solo implica un gesto de cobardía política,sino también una renuncia a esa herencia internacionalista.
Es aceptar que la ciudad ya no se posiciona del lado de los que luchan por la liberación,sino del lado de quienes administran el statu quo global.

Ese retroceso tiene nombres propios: pequeñez moral,temor a la presión estadounidense,comodidad política y una enorme dosis de ignorancia histórica.

🔸4) Un país que tolera monumentos a opresores,pero no a liberadores:

La contradicción es flagrante. 
Montevideo tiene calles,plazas y monumentos dedicados a figuras cuya historia está manchada de colonialismo,racismo o dominación económica.
Allí no hay polémica.
Allí no hay debates televisivos.
Allí no hay indignación moral.

Pero cuando se propone homenajear a un líder que dedicó su vida a expulsar al colonialismo,entonces la sociedad “bienpensante” reacciona ofendida.
¿Por qué?
Porque Ho Chi Minh no representa un poder pasado: representa un desafío presente. 
Recuerda que es posible vivir sin arrodillarse frente al capital extranjero. 
Evoca la memoria de los pueblos capaces de derrotar al invasor. 
Y eso es intolerable para quienes custodian los intereses de las élites mundiales.

🔸5) La dignidad ausente en quienes se oponen:

🗣️-Los que hoy le niegan una estatua en Montevideo no tienen ni un átomo de su dignidad.-
Esa afirmación es tan dura como justa.
Ho Chi Minh vivió en la más absoluta austeridad,rechazó todo privilegio personal, trabajó incansablemente por la unidad nacional y jamás se enriqueció con el poder.
Su grandeza no se explica por su cargo,sino por su conducta.

Comparar esa coherencia con la liviandad moral de quienes hoy lo rechazan produce una distancia abismal.
Los opositores no temen a Ho Chi Minh: temen a lo que revela sobre ellos mismos.
Temen al espejo.
Temen a su propia falta de coraje,a su tradición de acomodarse al viento y a su incapacidad de sostener una posición que incomode a los centros de poder.

🔸6) La lucha por la memoria también es lucha de clases:

El debate sobre la estatua no es estético,ni urbanístico,ni administrativo. Es ideológico.
Es una disputa por el sentido del espacio público.
Es la pregunta por quiénes pueden ocupar el centro de la ciudad y quiénes deben permanecer relegados al margen.
Es,en última instancia,un capítulo más de la lucha de clases en el terreno simbólico.

Una ciudad que niega a Ho Chi Minh es una ciudad que intenta negar la vigencia de la lucha antiimperialista.
Es una ciudad que prefiere limpiar su espacio público de símbolos que cuestionen la hegemonía capitalista.
Es una ciudad que prefiere volverse dócil antes que crítica.

🔸7) Recuperar la dignidad histórica:

La crítica no es solo un lamento: es también un llamado.
La izquierda uruguaya necesita recuperar su tradición antiimperialista,su identidad solidaria con las luchas del mundo,su capacidad de honrar a quienes dieron su vida por la libertad de sus pueblos.
No se trata de levantar una estatua por levantarla: se trata de defender un principio.
El principio de que la memoria de quienes lucharon por la liberación merece un lugar en el espacio público y en la conciencia colectiva.

Los comunistas no podemos permitir que borren nuestra historia internacionalista para agradar a los guardianes del orden global.
Una estatua a Ho Chi Minh no sería un gesto de nostalgia: sería un gesto de dignidad.

Ⓜ️arcelo Rubéns Balboa ✍️

*Nota: -Cuando me refiero a la sociedad "bienpensante"me estoy refiriendo a la clase política y principalmente al gobierno.-

•La humanidad dividida: la verdad que muchos prefieren ignorar•🅿️or Marcelo Rubéns Balboa ✍️


La historia de la humanidad es,en esencia,la historia de la división entre quienes poseen y quienes producen; entre quienes acumulan y quienes sobreviven; entre los que mandan y los que obedecen. 
Esta fractura no es un detalle menor ni un accidente pasajero: es el eje estructural sobre el cual se ha levantado cada sociedad basada en la propiedad privada de los medios de producción.

Hablar de “humanidad” como si se tratara de un cuerpo homogéneo es,por tanto,una abstracción cómoda. 
Es una forma de diluir el conflicto real que atraviesa la vida cotidiana de miles de millones de personas. 
La humanidad no es una unidad armónica: 
está partida en dos grandes campos irreconciliables. 
Por un lado,una minoría que concentra riquezas,recursos,tierras y capitales; por otro,una mayoría que sólo posee su fuerza de trabajo para sobrevivir. 
Esta división no es moral ni sentimental: 
es material,concreta,visible en cada fábrica,oficina,barrio obrero o conglomerado financiero.

Los ricos no son ricos por casualidad,ni los pobres lo son por mala suerte. 
Las fortunas se construyen a partir del trabajo de otros,mediante la apropiación del excedente social producido por quienes no poseen nada más que su tiempo y su esfuerzo. 
Llamar “explotación” a este mecanismo no es ideología: es precisión conceptual. Ignorar este antagonismo —hacer de cuenta que todos tienen “las mismas oportunidades",que “el mérito” define el destino de cada uno— es cerrar los ojos frente a la estructura que define el mundo contemporáneo.

Quienes piden “unidad” sin conflicto,“paz social” sin justicia o “consenso” sin transformación omiten que no puede haber armonía donde hay intereses opuestos. 
El propietario necesita obtener más ganancia; el trabajador necesita mejores salarios y condiciones. 
El capital exige flexibilidad,precarización y reducción de costos; la clase obrera exige estabilidad,derechos y dignidad. 
Estas demandas no son compatibles por naturaleza. Así nace la lucha de clases: no como un deseo ideológico,sino como el resultado inevitable de vivir en un sistema donde las necesidades de uno chocan frontalmente con las del otro.

No comprender esta división fundamental,o pretender que puede evaporarse con discursos moralistas,significa abstraerse de la realidad misma. 
Significa desarmar políticamente a los explotados y dar ventaja a quienes ya dominan. 
La burguesía siempre supo que su poder depende de ocultar el conflicto; por eso invierte tanto en propaganda,en “sentido común”,en discursos que culpabilizan al pobre y santifican al rico.

Reconocer la existencia de esta división no es fomentar odio,sino asumir la verdad histórica que permite transformar la sociedad. 
Porque sólo quienes comprenden la raíz del problema pueden luchar por una solución real. 
Y la solución —como demostraron todos los procesos emancipatorios— jamás vendrá de arriba,sino de la organización consciente,combativa y solidaria de quienes viven del trabajo.

La humanidad podrá algún día ser realmente una sola,pero eso sólo será posible cuando desaparezca la división entre explotadores y explotados; cuando la riqueza que producimos colectivamente pertenezca también de forma colectiva; cuando la vida deje de estar subordinada al lucro. 
Hasta que ese día llegue,la claridad es un deber: el antagonismo existe,nos atraviesa,y reconocerlo es el primer paso hacia la justicia social.

Ⓜ️arcelo Rubéns Balboa ✍️ 

sábado, 15 de noviembre de 2025

🚩 "El Niño de la bandera roja" 🚩



Alza los brazos el niño,
como quien eleva un sueño,
y la tela roja ondula
con la pureza del viento.

No conoce más cadenas
que las de su propia infancia,
pero en sus ojos despierta
la memoria de la patria.

La bandera se hace llama,
promesa,lucha y ternura;
un símbolo que en sus manos 
recobra vida y altura.

No grita,pero en su gesto
hay siglos de voz obrera,
y un mañana que se escribe
con la tinta de la tierra.

Pequeño guardián del fuego,
hijo de pueblo y de historia,
que tu inocencia ilumine
el sendero de la gloria.

Que jamás doblen tus brazos,
ni se apague tu mirada; 
porque en ti,niño del campo,
la esperanza y el futuro se alzan,
con voz fuerte clara.

Ⓜ️arcelo Rubéns Balboa ✍️

🔸El verdadero partido de la clase obrera y el peligro de los pseudocomunistas🔸❗❗ 🅿️or Marcelo Rubéns Balboa ✍️



En la historia política del movimiento obrero latinoamericano,el Partido Comunista ha representado —con todos sus aciertos, contradicciones y procesos internos— la organización destinada a expresar de manera programática los intereses históricos del proletariado. 
Su razón de ser es sencilla y profunda: 
dotar a la clase trabajadora de una herramienta colectiva capaz de disputar el poder,formar consciencias,organizar la lucha y orientar estratégicamente la construcción de una sociedad sin explotadores ni explotados.

Sin embargo,en las últimas décadas se ha vuelto evidente un fenómeno que amenaza ese rol histórico: la aparición —y en algunos casos,la consolidación— de dirigentes pseudocomunistas. 
Son figuras que,amparadas en discursos revolucionarios,reproducen prácticas alejadas de la lucha de clases y muchas veces funcionales a las clases dominantes. 
Su presencia constituye un riesgo profundo para el movimiento obrero,porque distorsiona su rumbo y debilita la confianza de las bases.

🔸¿Quiénes son los pseudocomunistas?

No se trata simplemente de militantes equivocados o inexpertos. Nos referimos a dirigentes que:

🔸Hablan en nombre del marxismo,pero actúan bajo los parámetros del oportunismo.

🔸Negocian privilegios a espaldas de la militancia.

🔸Moderan su programa para ser aceptados por sectores del poder económico.

🔸Conviven cómodamente con el parlamentarismo burgués,sin utilizarlo como tribuna revolucionaria.

🔸Usan la simbología comunista como escudo identitario,pero rechazan la radicalidad necesaria para transformar la realidad.

En América Latina,donde la burguesía cuenta con recursos enormes para dividir,cooptar o neutralizar a los movimientos populares,estos pseudocomunistas se han convertido en una herramienta útil para desactivar las corrientes más combativas del proletariado.

🔸🔸La confusión como arma contra la clase obrera🔸

El peligro no es sólo organizativo,sino también ideológico. 
Cuando un dirigente que se proclama comunista pacta con sectores oligárquicos, renuncia al programa socialista o abandona 
a los trabajadores en los momentos decisivos,envía un mensaje devastador: 
que la revolución es un slogan vacío y que el comunismo es adaptable a los intereses de los poderosos.

Ese mensaje genera desmoralización,
dispersión y cinismo dentro de las bases. 
Los pseudocomunistas,incluso sin proponérselo,facilitan la narrativa burguesa que acusa a los movimientos de izquierda de “ser todos iguales”,igualando militantes entregados a la causa con burócratas acomodados.

☭ ❗La tarea histórica del proletariado: vigilar y depurar.❗ ☭

La clase obrera debe cultivar una vigilancia permanente sobre sus propias direcciones. 
El Partido Comunista no puede convertirse en una estructura estática,cerrada,ni dominada por figuras eternizadas en sus cargos. 
Debe mantener mecanismos democráticos de crítica y autocrítica,formación política constante y renovación de cuadros que provengan de los centros de trabajo,
los barrios populares y la lucha cotidiana.

Un partido sin control proletario corre el riesgo de transformarse en un aparato burocrático. 
Y un aparato burocrático es terreno fértil para que los pseudocomunistas se afiancen y bloqueen el avance revolucionario.

☭ •Volver al marxismo,volver a la lucha•☭

La respuesta no es la resignación,sino la claridad política. 
El comunismo latinoamericano debe volver a sus bases: el estudio riguroso del marxismo,la inserción orgánica en las fábricas y los territorios,la denuncia frontal del capitalismo dependiente y la apuesta estratégica por el poder obrero.

Sólo un partido verdaderamente proletario —sin ataduras a intereses ajenos a la clase trabajadora— puede conducir la lucha hacia una sociedad donde la explotación sea un recuerdo del pasado.

Hoy más que nunca,la alerta está encendida: 
el enemigo no sólo se encuentra afuera,
sino también en las filas de quienes dicen representar lo que en realidad traicionan. 
La tarea del proletariado es distinguir,depurar y fortalecer su propio instrumento político.

Ⓜ️arcelo Rubéns Balboa ✍️ 

domingo, 9 de noviembre de 2025

📡•La clase obrera frente al avance de la tecnología en el siglo XXI• 💻 📳 🅿️or Marcelo Rubéns Balboa

El siglo XXI ha traído consigo una revolución tecnológica sin precedentes. 
La automatización,la inteligencia artificial,
la robótica y las plataformas digitales transformaron el modo de producir,consumir y relacionarse. 
Sin embargo,detrás del brillo del progreso tecnológico se esconde una realidad que golpea con fuerza a la clase obrera: la precarización,la pérdida de derechos laborales y la creciente desigualdad.

La tecnología,en sí misma,no es enemiga del trabajador. 
Lo que determina su carácter es la clase social que la controla. 
Bajo el dominio del capital,la innovación se orienta a reducir costos,aumentar la productividad y maximizar la ganancia,
sin importar las consecuencias humanas. 
Las máquinas no liberan al obrero del trabajo,sino que lo sustituyen o lo esclavizan bajo nuevas formas de explotación digital.

El obrero del siglo XXI ya no solo está en la fábrica; también está frente a una pantalla,manejando aplicaciones 
que controlan su tiempo,sus movimientos y hasta su rendimiento. 
El trabajador de plataformas —el “autónomo” que depende de un algoritmo— representa la nueva figura de un viejo problema: el capital sigue apropiándose del valor creado por el trabajo humano,solo que ahora lo hace con más eficiencia y menos responsabilidad.

La paradoja es clara: la humanidad produce más riqueza que nunca,pero esa riqueza se concentra cada vez más en menos manos. La automatización podría haber sido el preludio de una nueva era de bienestar colectivo,con menos horas de trabajo y más tiempo para el desarrollo humano. Pero bajo el capitalismo,se convierte en una amenaza constante para el sustento y la dignidad del trabajador.

La respuesta de la clase obrera no puede ser el rechazo irracional a la tecnología,sino su reapropiación. 
Es necesario que la ciencia y la técnica estén al servicio de la sociedad y no de la acumulación privada. 
La lucha del siglo XXI no solo es por mejores salarios o condiciones laborales,sino por el control social de los medios tecnológicos de producción.

Solo así la humanidad podrá transformar la tecnología en una herramienta de emancipación,y no en una nueva cadena invisible que someta a los trabajadores del mundo. 
La tarea sigue siendo histórica: organizarse,resistir y construir un futuro en el que el progreso sea sinónimo de justicia social.

Ⓜ️arcelo Rubèns Balboa ✍️

martes, 4 de noviembre de 2025

🔸Cuba: la fuerza de un pueblo que nunca se rinde 🇨🇺 🅿️or Marcelo Rubéns Balboa ✍️


El paso del huracán Melissa por Cuba vuelve a poner a prueba la fortaleza de un pueblo que ha sabido resistir todo tipo de embates, naturales y políticos. 

Pero si algo ha demostrado la historia cubana,es que su mayor riqueza no está en los recursos materiales,sino en la unidad y la conciencia colectiva de su gente.

Una y otra vez,ante ciclones,bloqueos o crisis internacionales,Cuba ha respondido con organización,solidaridad y disciplina social. 

Mientras en otros países los desastres naturales suelen derivar en caos y abandono, en la isla se multiplica la cooperación: los vecinos se ayudan,las instituciones actúan coordinadas,y el Estado prioriza la vida por encima de cualquier interés económico.

El huracán Melissa dejará su huella,sí,pero también reafirmará el espíritu indoblegable de una nación que ha aprendido a reconstruirse desde la dignidad. 

Los cubanos saben que no están solos; los pueblos del mundo que creen en la justicia social,en la soberanía y en la hermandad entre naciones,acompañan su dolor y su esperanza.

Porque Cuba no solo enfrenta los vientos del Caribe,sino también los vientos del imperialismo que hace décadas buscan quebrar su modelo social. 

Sin embargo,una vez más,el pueblo cubano demostrará que la verdadera revolución no se detiene ante ninguna tormenta.

Hoy más que nunca,nuestro abrazo fraterno y solidario al heroico pueblo cubano. 

Su ejemplo nos enseña que la fuerza colectiva puede resistirlo todo,incluso los embates de la naturaleza.

Ⓜ️arcelo Rubèns Balboa ✍️