Cuentan que al caer la tarde en el mar río,se escucha cantar a una hermosa sirena,dicen que justo ahí,donde las rocas forman un espejo,ella tiene su jardín donde cultiva las más hermosas flores.
Cada flor un sueño,cada sueño una flor,ella las acaricia,las protege,son un tesoro,las cuida.
Aquí,en la ciudad donde habita esta dama de las profundidades,la melancolía pasea sus pupilas sobre su reino,deja caer lágrimas que nutren sus flores,impregnándolas de ese aroma el cuál le llega a lo más hondo de su corazón.
Bajo el cielo,iluminada por la luna, rescata esos sueños perdidos,los hace flor con su magia,verde conjuro,una esperanza.
(...)
Cuando el sol despierta su sueño iluminando su jardín,ella se sumerge, descansa en su lecho de algas, esperando que algún día alguien se acerque y tome ese sueño flor,respire su aroma y se lo ofrende; a su propia existencia.
La rescatadora de sueños sigue con su tarea,todas las tardes, noches,nadie la ve,pero su canto se escucha,te está llamando,para que no se pierdan los sueños; aquí en Montevideo,donde nunca está sola la soledad.
(...)
Busca su jardín,que su melodía te guíe,rescata tus sueños,hazlos realidad,con todas tus ganas! y aunque no la veas dale las gracias a la seductora sirena,ella te sentirá,la harás feliz,te dará su bendición,grita su nombre con todas tus fuerzas!
Gracias Vida!
Marcelo Rubèns Balboa-
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