Un hombre cae sobre tierra árida,no hay futuro,demasiados pasados y un presente derrotado.
El hombre tiene en su rostro dos pupilas ciegas y en sus manos lágrimas de polvo,desnudo escarba con sus últimas fuerzas pesadillas repetidas.
El hombre tiene en su rostro dos pupilas ciegas y en sus manos lágrimas de polvo,desnudo escarba con sus últimas fuerzas pesadillas repetidas.
Raro septiembre que no cubrió los campos de verde,se marchitaron las flores,escondió al sol; se siente frío.
Desde los oscuros cúmulos que preceden lluvias unas alas descienden,sus manos lo acarician,
él se aferra y con un suspiro,apoya su cabeza en su pecho,escucha una canción susurrada al oído,siente paz ; se deja llevar.
él se aferra y con un suspiro,apoya su cabeza en su pecho,escucha una canción susurrada al oído,siente paz ; se deja llevar.
(...)
Cuando las primeras luces de la mañana golpean su frente resucita,
aún puede escuchar aquella voz,
sentir sus manos,los latidos de su corazón,pero no logra recordar su rostro.
El hombre acostumbrado al infierno,ahora mira hacia el cielo,ya no bebe con el Diablo,brinda cada noche con la luna hasta caer rendido,esperando en sueños poder ver el rostro de esas alas que en sus llamas creía que no existían...
aún puede escuchar aquella voz,
sentir sus manos,los latidos de su corazón,pero no logra recordar su rostro.
El hombre acostumbrado al infierno,ahora mira hacia el cielo,ya no bebe con el Diablo,brinda cada noche con la luna hasta caer rendido,esperando en sueños poder ver el rostro de esas alas que en sus llamas creía que no existían...
allí,donde habitaba...
en el lado oscuro de la vida.
Marcelo Rubéns Balboa✒
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